En la planificación del viaje cuatro días en Estambul parecían muchos: grave error ya que podríamos haber estado una semana sin apuros. Pasamos de mezquitas monumentales a palacios con jardines, de mercados callejeros a restaurantes, de Europa a Asia en minutos, de caminar por pisos adoquinados a navegar por un Estrecho de cuento, del silencio casi absoluto a los llamados a rezo. Así debe haberse sentido Liam Neeson en “Búsqueda implacable 2”. Les presentamos los diez imperdibles de Estambul:
¿Cómo llegar desde el aeropuerto al centro de Estambul?
Llegamos a Estambul desde Buenos Aires en un vuelo de Turkish Airlines.
Antes de llegar estudiamos la forma de llegar desde el aeropuerto hasta la zona de Galata, donde ya teníamos reservado el alojamiento.
Las formas de llegar desde el aeropuerto Atatürk hasta el centro de Estambul son:
- Servicios de transfer: La empresa oficial de transfer que trabaja en el aeropuerto es Havaist. Son autobuses grandes y muy cómodos. Tiene varios horarios y el ticket cuesta 8 euros. Se puede comprar online pero si quieren hacerlo en el momento tengan en cuenta que no aceptan pago en efectivo. Si compran la Istanbul Welcome Card tienen un 20% de descuento.
- Metro: Esta es la alternativa por la que optamos. Cambiamos unos pocos euros en el aeropuerto, el cambio nunca es bueno en los aeropuertos así que cambiamos lo justo y necesario. El ticket de metro cuesta 15 liras turcas y se compra en las máquinas que están en la estación de metro. El viaje dura un poco más de una hora.
Para saber cómo llegar lo mejor es usar Google Maps. Para tener internet en el celular les recomendamos que compren una tarjeta eSIM de Airalo Eurolink para estar conectados todo el tiempo. Al ser una tarjeta virtual, la pueden activar al llegar a Europa.
- Taxi: Los taxis son una opción conveniente para llegar al centro de Estambul desde el aeropuerto, especialmente si se tiene mucho equipaje o se viaja en grupo. Sin embargo, los precios de los taxis en Estambul pueden ser más altos en comparación con otras opciones de transporte público. Pueden reservar un traslado privado con anticipación haciendo click aquí.
¿Cuál es la mejor época para viajar a Estambul?
La mejor época para viajar a Estambul es en primavera (abril a junio) y otoño (septiembre a noviembre), ya que el clima es templado y agradable, con temperaturas promedio que oscilan entre los 15 y 25 grados Celsius. Durante estas estaciones, los días son soleados y las noches frescas, lo que permite disfrutar de paseos por la ciudad sin el calor sofocante del verano ni el frío extremo del invierno. Además, en primavera y otoño la afluencia de turistas es moderada, lo que significa menos multitudes y precios más accesibles en hoteles y atracciones turísticas.
En cuanto a la época más barata para viajar a Turquía, suele ser durante el invierno (diciembre a febrero), excepto durante las fiestas de Navidad y Año Nuevo. Durante estos meses, los precios de los vuelos, hoteles y actividades turísticas tienden a ser más bajos debido a la menor demanda de viajeros. Sin embargo, es importante tener en cuenta que el clima en Estambul durante el invierno puede ser fresco y lluvioso, con temperaturas que pueden descender por debajo de cero. Aunque hay menos turistas en esta época del año, todavía se pueden disfrutar de la rica historia y cultura de Estambul, con la ventaja de precios más económicos.
¿Cómo moverse en Estambul?
En Estambul, hay varias opciones de transporte público para moverse por la ciudad, incluyendo el tranvía, el autobús, el metro y los barcos. También existe una opción conveniente llamada Istanbulkart, una tarjeta recargable que se puede usar en varios medios de transporte público en Estambul.
Para recorrer el casco histórico, el tranvía es la mejor opción. El tranvía T1, también conocido como el tranvía histórico, recorre lugares como Sultanahmet, Eminönü y la zona de la Plaza Taksim. En los cuatro días que estuvimos nos manejamos prácticamente en tranvía y a pie.
Los barcos son una opción interesante para cruzar el Bósforo y disfrutar de las vistas panorámicas de la ciudad. Hay diferentes tipos de barcos, como los ferries y los barcos de línea costera (denominados «vapur» en turco), que tienen diferentes tarifas según las rutas y los destinos. Los precios pueden variar, pero generalmente se pueden pagar con la Istanbulkart o en efectivo.
Tomando los ferries que los locales usan como transporte público para ir a trabajar se pueden hacer paseos inolvidables por el Bósforo y el Cuerno de Oro. Más adelante les contamos cómo.
En cuanto a la Istanbulkart, es una tarjeta recargable que se puede utilizar en varios medios de transporte público en Estambul, incluyendo el tranvía, el autobús, el metro y los barcos. Se puede comprar en las estaciones de transporte público, quioscos de venta de boletos y en algunos establecimientos.
Si van a viajar por turismo, lo mejor es comprar la Istanbul Welcome Card que incluye 10 viajes en transporte público, acceso gratuito sin filas a las casi todas mejores atracciones de Estambul y recorridos guiados gratuitos.
Los imperdibles de Estambul:
Para que la experiencia en Estambul sea completa, reserven un lugar en los free tours de Civitatis!
Gran Bazar: números que abruman
- Entrada: Gratis
- Cómo llegar: Estación Beyazit-Kapalıçarşı del tranvía T1.
Ubicado en el lado europeo de Estambul: construido en 1455, tiene más de 58 calles, 22 puertas y 4.000 tiendas en una superficie de 45.000 m2. Los números abruman: 4.399 almacenes, 2.195 cuartos, 497 pequeños comercios, dos restaurantes, 12 oficinas, una mezquita principal y 10 menores. Sigue: un baño turco, 19 fuentes, 8 pozos con sus bombas, 24 mesones, una escuela y una tumba.
Las banderas turcas están en todos lados, los comerciantes esperan a sus clientes en las entradas de los locales donde algunos insisten y te dan algún dulce típico para probar. Reconocen a los turistas en segundos y empiezan a hablar en tu idioma al instante.
Un dato importante: hay mejores precios fuera del Gran Bazar. Hasta un café es bastante más caro dentro que fuera. Más allá de los precios es una visita obligada.
Bazar egipcio: cuando más chico es mejor
- Entrada: Gratis
- Cómo llegar: Estación Eminönü del tranvía T1
También conocido como Bazar de las Especias fue construido entre 1663 y 1664 por el sultán Turhan, y es considerado uno de los más antiguos de Estambul. El mercado forma parte del complejo de la mezquita Yeni Capii, en el barrio de Eminönü, en lo que era el corazón de la antigua ciudad amurallada de Constantinopla.
Tiene forma de “L” y mide unos 150 metros de largo de lado más largo, y 120 del lado más corto. Vamos a cargar toda la vida por no haber comprado té de manzana y un molinillo manual. En cuanto a impresiones nos pareció más auténtico que el Gran Bazar -está adaptado más al turismo. La única contra son los espacios más reducidos –a diferencia del Gran Bazar-, lo que hace más complicado moverse.
Comer en el centro del mundo: culturas que convergen en la cocina
Estambul es una ciudad soñada para los amantes de la gastronomía: hay mercados callejeros, desayuno para guerreros, rincones a los que no van los turistas, sobredosis de té, el mejor hojaldre, un café espectacular y, abundancia de pistacho.
Les recomendamos que dediquen un día completo a un tour gastronómico por los dos continentes. Para ver el post completo sobre nuestra experiencia gastronómica hacé click acá.
La gran Mezquita Azul
- Entrada: Gratis
- Cómo llegar: Estación Sultanahmet del tranvía T1
En un punto estratégico de Estambul se levanta uno de los símbolos de la ciudad: la Mezquita de Sultanahmet o Mezquita Azul, construida entre 1603 y 1617 en el reinado de Ahmet. Debe su nombre al color azul francia de los mosaicos que decoran sus cúpulas: es la única mezquita con seis torres, y en su construcción se utilizaron 21.043 azulejos, y tiene 260 ventanales alineados en cinco niveles.
Importante: La entrada es gratuita, y al igual que los templos del sudeste asiático tiene algunos requisitos: hay que entrar descalzo y las mujeres con la cabeza cubierta con un pañuelo. Además, no se puede visitar con pantalones cortos o con los hombros descubiertos. A diferencia de Camboya, donde tuvimos que comprar una remera para entrar, si fueron con musculosa no se preocupen ya que se entregan pañuelos de manera gratuita para poder entrar.
Iglesia de Santa Sofía: un museo imperdible
- Entrada: Gratis. En 2020 volvió a ser una mezquita por lo que ya no se cobra entrada.
- Cómo llegar: Estación Sultanahmet del tranvía T1
Con el correr de los años pasó de ser una catedral cristiana a una mezquita. Es uno de los monumentos más espectaculares del arte bizantino. También llamada Iglesia de la Divina Sabiduría o Hagia Sophia, la Iglesia de Santa Sofía, hoy es un museo. En su interior dominan el color negro y el dorado. Es el gran imperdible de Estambul.
El Palacio de Topkapi: aquí vivía el Sultán
- Entrada: La entrada al Palacio más el Harem sale eur 31.
- Cerrado los martes.
- Cómo llegar: Estación Sultanahmet del tranvía T1
Es un reflejo del poder que alcanzó el Imperio otomano. El sultán Mehmet II “el conquistador”, lo mandó a construir como demostración de ese poder. Formado por varios edificios en torno a cuatro patios a los que se accede a través de grandes portones, el palacio aloja en su interior los museos del antiguo oriente, de la cerámica turca, de Santa Irene y de arte turco e islámico. Este último contiene una colección de cerámicas, miniaturas, objetos de metal y algunas de las alfombras más antiguas del mundo. Fue centro administrativo del Imperio otomano desde 1465 hasta 1853.
Además, de los museos y jardines cuenta con un Harem –donde vivía el Sultán- que es espectacular y por el que hay que sacar una entrada aparte. Altamente recomendable al igual que el Tesoro, que cuenta con algunos de los objetos más valiosos del mundo: como “el diamante del cucharero”, un diamante de 88 quilates que perteneció a Letizia Ramolino, madre de Napoleón o el puñal Topkapi, el arma más cara del mundo que tiene oro con esmeraldas incrustadas.
Importante: el Palacio y sus alrededores son tan grandes que su visita lleva toda una mañana.
La Cisterna Basílica: en la profundidad de la historia
- Entrada: el valor es de eur 13
- Cómo llegar: Estación Sultanahmet del tranvía T1
Construida en el siglo VI por el emperador bizantino Justiniano I, fue la reserva de agua más grande en el Gran Palacio Bizantino: tiene 140 metros de largo y 70 de ancho. En un ambiente lúgubre y misterioso. De sus 336 columnas resaltan dos muy llamativas: cada una tiene en su base un enorme rostro de Medusa que se encuentra boca abajo. Se presume que habrían sido sacadas de algún edificio del último período del Imperio Romano. Si bien está dentro del circuito clásico se diferencia de las mezquitas y los mercados. Se puede visitar a la salida de Santa Sofía, y no lleva más de una hora.
Cuerno de Oro: un atardecer alucinante
Este fue el paseo más complicado del viaje ya que no encontramos una empresa privada que lo haga y optamos –obligatoriamente- por el transporte público. Aquí quedó plasmada la buena voluntad y paciencia de muchos turcos: aún con la barrera del idioma hicieron lo imposible para indicarnos donde tomar el barco.
El ferry se toma en el puerto Karakoy y hay que tomar el barco de la línea Golden Horn que va hasta Eyup, parada donde hay que bajar. Lo mejor de haber demorado en tomar la embarcación es que nos agarró la hora del atardecer y vimos caer el sol en un marco soñado. Dicen que los bizantinos tiraron todo el oro al agua cuando iban a ser atacados por el Imperio otomano, por eso “Cuerno de Oro”.
La Torre de Gálata: las mejores vistas de la ciudad
- Entrada: el valor es de eur 17
- Cómo llegar: Estación Karaköy del tranvía T1
Tuvimos el privilegio de verla de cerca los cuatro días que estuvimos en Estambul ya que nos alojamos a pocos metros. Construida en 1348, tras la expansión de la colonia genovesa de Constantinopla. Con nueve pisos y casi 67 metros de altura, era entonces la edificación más alta de la ciudad.
A principio de los años 60, se cambió el interior original de madera por una estructura de hormigón con el fin de una mejor conservación. Sin dudas tiene las mejores vistas de la ciudad. Se puede comer en el restaurante que se ubica en el último piso –precios elevados como la torre-. Una opción: enfrente hay un café Lavazza impresionante a precios más acomodados.
Recomendamos alojarse en el barrio Galata de Estambul
Les recomendamos el World House Hotel ubicado en el Barrio Galata. Es un hostel económico, muy bien ubicado y ofrece el típico desayuno turco. En este link les contamos nuestra experiencia con el alojamiento en esta parte de Estambul.
Kadıköy: la parte asiática
Estambul no es solo la parte europea de la ciudad. Alejado de los monumentos icónicos de la ciudad conocimos el lado asiático a través de Kadıköy, uno de los barrios de moda de Estambul. A pesar de lo que imaginábamos, el lado asiático es más limpio y la arquitectura es más tradicional, del estilo de los barrios residenciales de las grandes ciudades europeas.
Es fácil y rápido llegar: el barco hasta la estación Kadikoy demora quince minutos desde el lado europeo. Vale la pena solo por el bullicioso mercado callejero donde se pueden probar exquisiteces como embutidos, pickles o simplemente tomar un té, y deambular al ritmo de los locales. También se disfrutan los enormes murales que la convierten en una ciudad donde abunda el arte urbano. Hay docenas de bares donde parar a tomar algo y ver la gente pasar.
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Gracias por tu comentario Romi!
Nos alojamos en El Barrio Galata en el hostel World House (te dejo el link del post https://ahivamos.info/donde-alojarse-en-estambul/) La zona nos gustó mucho y como decís, es un muy buen punto estratégico para salir a recorrer. En cuanto a salir sola de noche, es como todos lados, hay que tener cuidado. No es oscuro, hay muchos lugares para cenar pero tené presente que los horarios que se manejan no son los mismos que en Bs. As… todo termina temprano. Nosotros llegamos a Estambul a las 12 de la noche y ya no había casi nadie en la calle!
El Cuerno de Oro es como una «curvita» que hace el Bósforo hacia adentro, y siempre del lado europeo. Al lado asiático podés llegar tomando un ferry hacia Kadikoy, por ejemplo, pero no es el Cuerno de Oro.
Espero que te haya aclarado algo. Cualquier duda avisanos 🙂
Saludos!!! Ale
Excelente descripción!!!!!!